divendres, 28 de juliol del 2017

ESPAÑOL DE AYER, ESPAÑOL DE HOY

"...de ciencias y artes ignora lo suficiente para poder hablar de todo con maestría. [...] Habla un poco de francés y de italiano siempre que había de hablar español, y español no lo habla, sino lo maltrata: a eso dice que la lengua española es la suya, y que puede hacer con ella lo que más le viniere en voluntad..."
(Fragmento del artículo "Empeños y desempeños", de Mariano José de Larra, aparecido en el nº 4 de "El Pobrecito Hablador", en septiembre de 1832.)

dijous, 27 de juliol del 2017

COMO AYER, DIRÉ

Hoy me he mudado de libro varias veces, y todo por diferir y aun eludir la entrada en el mío, en los míos, casas sin plano, ladrillos apenas apuntados en las encías de la tierra como dientes incipientes. No hay sabor sin alimento, ni hogar sin miradas repetidas ni olores inconfundibles; no hay vida que contar sin el despilfarro previo de la vida. ¿Asiento? El del tiempo.

RECUERDO INFANTIL

"Ronda, ronda, el que no se haya escondido que se esconda, que tiempo ha tenido".
(En busca de los jugadores perdidos.)

dimecres, 26 de juliol del 2017

TRAMPANTOJO JUDICIAL (IV: NO LA CANCIÓN DEL PIRATA, NO)

"Caliente, caliente, eh, oh,/ caliente, caliente, oh, ah" No, no, con esta no se hace el amor en el sur, que esa es otra canción. Con la justicia y sus amigas -la democracia, la libertad, la igualdad y demás hetairas-, circunspección, corbateo y amenazas de solución final a la española. "Caliente, caliente, eh, oh,/ caliente, caliente, oh, ah". Presida, presidente, "caliente, caliente", presida y no emascule al ausente y soberano pueblo que en la calle ni grita ni silente espera la ocasión de bailar con otra que con la más fea, la vergüenza de su venalidad miserable, la miseria de su impudicia. Canta, Raffaella, "caliente, caliente, eh, oh,/ caliente, caliente, oh, ah". Mariano está en la sala, "caliente, caliente", le han concedido entrar sin medida, "oh, ah". Sí, sí, "caliente, caliente, eh, oh,/ caliente, caliente", y más y más y más.

TRAMPANTOJO JUDICIAL (III: ESCALERA DE CALOR CANICULAR)

Ley, constitución, democracia, justicia, beneficio, risa, olvido, ar.

TRAMPANTOJO JUDICIAL (II: SEPARACIÓN DE PODERES)

¿Gobierna el juez? ¿Los títeres son... para los juicios de verano?

TRAMPANTOJO JUDICIAL

¿Defiende, el buen juez, la causa de la justiicia ante el mal administrador de la cosa pública o es el mal juez quien encausa a los administrados al dictado del surrealismo criminal del gobernante?

CALENTANDO MOTORES Y ENTERRANDO A HERÁCLITO, RUBÉN

"Te putotequiero"
(Madre habladora y poco escuchadora recibe indiferente la declaración afectiva de su hija desjuiciada, aunque menos que ella.)

dimarts, 25 de juliol del 2017

EL LECTOR

Lectores hay que leen mucho; es decir, muchas veces lo suyo.

SONADOR QUE SUENA EN SILENCIO

"Si alguien se encuentra cerca de la felicidad, le ruego que deje señas de la parada de bus más cercana o amojone el despeñadero de los desesperados, no sea que me precipite por él antes de tiempo."
(Leído en un papel pisoteado en la entrada del cementerio del pueblo donde resido. Ignoro si las palabras corresponden a un finado o, por el contrario, a un apenas vivo.)

dilluns, 24 de juliol del 2017

LOS 300: DE LEÓNIDAS AL EURO

Si el espartano hubiera sabido de los prodigios que un quídam barcelonés dice poder hacer con 300 euros, a los que estira ad infinitum merced a la finísima goma de que están compuestos sus billetes y sólo ellos, quizá en vez de por su valor y autenticidad, habría seleccionado a sus hombres por su precio, estimado, claro, en moneda del futuro occidente europeo. Y si el tal milagrero del Mediterráneo catalán conociera de primeras lecturas que estrechuras hay que valen más que un imperio, tal vez no vendería sus mentiras de bar en bar y se persuadiría de que la pobreza, en su caso, es un estado de cobardía y miseria intelectuales.

EL HOMBRE INCENDIARIO

El artista resulta maravilloso porque, alienándose, miente con la ilusión de la verdad, y a nadie ofende. Pero cuando intenta aproximarse a ella, es un hombre pleno que nadie entiende.

LA FELICIDAD DE LAS HORMIGAS

Pisar y pisar: ¿caminar? Con naturalidad hasta hoy, en que me ha dado por revisar la suela de los zapatos. Un poeterío aplastado he visto; un poetar en jugo diluido se ha extendido. Sin querer, vendimiar al paso. Mientras, la bodega construyen las hormigas, para cuya felicidad las barricas esperan.

diumenge, 23 de juliol del 2017

NATURAL

He salido de la angustia por liberarla de mí. Hay dolores nobles. Secuencias hay de la aflicción que han de rodarse sin la mediación de una cámara.

dijous, 20 de juliol del 2017

QUÉ O CÓMO (¿POR QUÉ Y PARA QUÉ?)

Abrió la boca y dijo. Lo anotó y lo anotaron. Después, leyeron, y no se pusieron de acuerdo en qué clave hablara, o en qué registro o género. En el aire, los restos y aun el mismo cuerpo de lo dicho confundiéndose con lo aflorado a la vista de los ciegos.

EL HOMBRE SIN MULTITUDES

Ese hombre estaba predestinado para grandes logros y la felicidad, no como nosotros. Hiciera lo que hiciese, reservada tenía la gloria. Lo mirábamos en busca de alguna señal, pero incluso eso nos había sido vedado. Aclamación silente, a nuestro parecer. Nueva sortería. Vacante estaba también la suerte de los sordos.

EL OLVIDO COLECTIVO

"El Estado no es «dueño» del aire, el agua, los terrenos públicos, las zonas costeras o la fauna y flora salvajes, y no puede hacer con ellos a su antojo. Está autorizado para actuar exclusivamente como agente administrativo y fiduciario del pueblo y, conforme a la doctrina de la confianza pública, no puede ceder ni permitir la destrucción de dichos recursos."
(Fragmento de "Pensar desde los comunes. Una breve introducción", de David Bollier, según traducción de Guerrilla Translation.)

LA PEQUEÑEZ DE LOS GUSANOS

Reventó el "Dragon rapide" el ansia de miles de insectos. La tragedia, sin embargo, aún no se había consumado. Los hombres incautos empezarían a morir como mosquitos a partir de entonces. Los gusanos, pese a todo, no han aumentado de tamaño.

EL ACTO, LA CONSUMACIÓN, EL PLACER

Asistí hace unos días a un acto literario cuya naturaleza revelaré a medias por no perjudicar a quienes no se lo merecen. La autoridad de los oradores era reclamo suficiente para que el salón en el que se desarrolló el evento hubiese sido ocupado por los más de cien asientos de que disponía. No fue así, empero; apenas la mitad de las cómodas butacas, mal contando adrede, dio solaz a sendos familiares, diletantes y amigos de los declamadores, quienes, con la salvedad de los primeros, estaban más preocupados de su pobre imagen y peso creído del saber propio que de los magníficos citadores. Ridículo resultaba ver casi saltar, sin agilidad alguna, a este o aquel autorcillos de desechables obras en pos del conocido y rival íntimo de turno a fin de saludarlo en falso y achinando los ojillos los más arremeter con la cantinela de su libro en ciernes o acabado de alumbrar en cualquier tabuco con encanto de la ciudad. Sin excepción, los mejor colocados en la carrera imaginaria de la soberbia o baldía, muy a su pesar, vanidad de fruslero fuste, como los gatos, ¡fu, fu!, no portaban el libro que es de rigor y respeto adquirir, y así desvelo el qué del asunto que nos convocara, aunque no de los actores; ellos, los vanidosos de efímero vuelo, se elevaban en el aire del lugar con tan escaso impulso que caían de inmediato sobre algún desavisado al que chafaban como perdices en las siembras. Vitalidad, por tanto, en franco entredicho, e inversamente proporcional a un menesteroso arribismo de cartonería y aun de cartón piedra que los circunscribía a poco más que una sonrisa sin fundamento o con no mayor que el del beso de Judas. Hablarán, después, hablarán. Porque su presencia prestigia y su liberalidad es inabarcable. ¡Qué sería de la posteridad sin fedatarios tan perspicaces! Nosotros, los nadies, salimos del local con el libro en las manos dispuestos a celebrar su nacimiento ante unas cervezas bien fresquitas. A fe que lo hicimos, y sin un ápice de amargura nos las bebimos, de intento lo digo.

dimarts, 18 de juliol del 2017

QUID DVINUM

Hoy no has salido a la puerta a recoger la ración correspondiente, amigo.

ESCRIBE, ESCRIBA, EN LA ESCRIBANÍA COMO SI DE LA PIEDRA ANGULAR DE UNA NUEVA IGLESIA SE TRATARA

Enloquecer, finalmente, no está en tu mano, ni en tu cabeza un sombrero toca pensamiento alguno por más que intentes levantar el brazo. Eso sí, habrá legiones de pitecántropos saludando la turbulencia de tu osadía sobre el teclado del ordenador.

dilluns, 17 de juliol del 2017

CARTA ANTIGUA, DESEO VERDE COMO EL ROMERO

El analfabetismo de la mayoría de mis vecinos me convirtió en la infancia en un amanuense activo. El niño poco-niño que era, el niño prudente, maduro a destiempo, desencantado precoz; el niño desjugado cuya inocencia vestía galas de adulto perdedor, como venido de la derrota de una guerra que ensartó a su padre del mismo modo que el esperma de éste lo hizo con el óvulo atemorizado de su madre para que el uno y la otra padre y madre suyos fueran; el niño con letras invisibles en la mano era requerido por caras duras, cetrinas, brunas, tostadas caras suplicantes que se reblandecían o crispaban según revelaban sentimientos inconfesables. El niño-puente escribía cartas de aquí para allá, leía cartas de allí para los de acá; veía llorar, el niño, oía sufrir, y a veces maldecir; el niño no entendía, con todas sus luces, qué cosa querían decir las palabras en clave que la vida miserable ponía en las bocas de sus vecinos menesterosos, o, para ser preciso, de sus vecinas, pues los hombres vivían en el cercano extranjero de las fábricas, los bares, los miedos de las calles sin luces. Escribía el niño según las viejas fórmulas de salutación y despedida que la oralidad transmitía con frustración escribana. Escribía el escribiente ("así, como te lo digo, niño, no t'apartes de mí") mientras lloraba a su vera una mujer desgreñada y olorosa de aceite. "Queridos tal: espero que a la llegada de esta a vuestro poder os encontréis bien de salud, nosotros bien, gracias a Dios. Fulanitos, estas cuatro letras son para deciros que... Y sin más que deciros, se despide de vosotros esta que os quiere y que os tiene en el pensamiento..." Un pañuelo en la nariz tormentosa. Alivio de escribiente y confesante. "Toma, niño, pon ahí las señas, no te dejes ni una letra, que si no, no llega a su sitio. Ea, que Dios te lo pague. Coooonchaaa, ¡vaya niño tienes!"

EL NIÑO DE LAS LUCES

"¡Qué luces, las del niño!", casi pregonaba la anciana. "¿Qué luces eran?", oscuramente se preguntaba al final de sus días el hombre trunco.

divendres, 14 de juliol del 2017

SANTA TERESA, EXUBERANTE, EXCESIVA, CASI

"¡Oh hermosura que excedéis/ a todas las hermosuras! Sin herir, dolor hacéis,/ y sin dolor deshacéis/ el amor de las criaturas.// ¡Oh ñudo que así juntáis/ dos cosas tan desiguales,/ no sé por qué os desatáis,/ pues atado fuerza dais/ a tener por bien los males!// Quien no tiene ser juntáis/ con el Ser que no se acaba; sin acabar acabáis,/ sin tener que amar amáis,/ engrandecéis vuestra nada."
(Poema "¡Oh hermosura que excedéis!", de Santa Teresa de Jesús.)

EL TIEMPO, EL TIEMPO

«El pasado nunca muere.
Ni siquiera es pasado».
(William Faulkner)

ENCUENTRO

La pusieron frente a la tele: ni la había pedido ni la rechazó. Frenaron las ruedas de la silla: nada le dijeron, nada esperaban oír. Acababan de empezar la guardia de veinticuatro horas, algunas más de las que necesitó para morir en presencia de desconocidos. Ella, ellos, sin cópula, perdidos.

SOBRE LA LIBERTAD Y LA DEMOCRACIA

"Hubo un tiempo en que las naciones imperialistas ejercían un control militar directo sobre la población y los recursos, para su posterior explotación. En la era neocolonial el proceso
se ha vuelto más refinado: con el beneplácito de la ley, los inversores y especuladores extranjeros simplemente negocian transacciones comerciales con gobiernos cordiales y autocontratantes que reciben de buen grado el saqueo de su patria. ¿Qué podría ser más lucrativo que la venta particular del patrimonio público a precio de ganga?"
(Fragmento de "Pensar desde los comunes. Una breve introducción", de David Bollier, según traducción de Guerrilla Translation.)

dijous, 13 de juliol del 2017

¿DILEMA ESPAÑOL?

En el artículo titulado "Mi nombre y mis propositos", Mariano José de Larra se preguntaba si su pluma podía gozar de algún reconocimiento en la España de su tiempo. "Acerca del miedo de que no me quieran oír", confesaba, "asegurome [un interlocutor imaginario] muy seriamente que no sería yo el primero que hablase sin ser oído, y que como en esto más se trataba de hablar que de escuchar, más preciso era yo que mi auditorio. Ridículo es hablar, me añadió, no habiendo quien oiga, pero todavía sería peor oír sin haber quien hable. Acerca de si me querrían entender, me tranquilizó afirmándome: que en los más no estaría el daño en que no quisiesen, sino en que no pudiesen. Y en lo del riesgo de gustar poco a unos y disgustar mucho a otros, '¡Pardiez! -me dijo-, que os embarazáis en cosas de poca monta. Si hubieren cuantos escriben de pararse en esas bicocas, no veríamos tantos autores que viven de fastidiar a sus lectores; a más de quedaros siempre el simple recurso de disgustar a los unos y a los otros, dejándolos a todos iguales; y si os motejan de torpe, no os han de motejar de injusto'."

¡VAMOS, HIJOS DE LA PATRIA!

Mientras unos despiertan y toman La Bastilla (allons, allons!), otros se toman la pastilla para dormir (¡vamos, joder, con dos cojones mesetarios!).

ROBAR CON LA LEY EN LA MANO

La historia del hombre apenas contiene sorpresas. Ayer, hoy y mañana, este o aquel continentes, un hemisferio y el otro son indistinguibles. Leamos:
"La ley encierra al hombre o la mujer
que los gansos del común han de sustraer
pero deja en libertad al ladrón
que roba las tierras comunes del ganso, sin perdón.
La ley exige que expiemos
culpas cuando lo que no es nuestro tomemos
pero condona a damas y caballeros
que toman lo tuyo y lo mío, arteros.
Los pobres y los desahuciados no escapan
si, temerarios, la ley quebrantan,
y eso está muy bien, mas hay que tolerar
a quienes conspiran para las leyes crear.
La ley encierra al hombre o la mujer
que los gansos del común han de sustraer
y los gansos toleran la falta de tierra
hasta que alguno va y la recupera."
(Poema anónimo de protesta por los cercamientos en la Inglaterra del siglo XVIII, incluido en "Pensar desde los comunes. Una breve introducción", obra de David Bollier que ha traducido Guerrilla Translation.)

dimecres, 12 de juliol del 2017

FREUDIANA

¿Puede ser la eyaculación precoz el motor fallido de la historia?

THOREAU, LARRA Y LA LIBERTAD

Tal día como hoy de hace doscientos años nació en Concord, Massachusetts, Thoreau, a quien hago gracia de presentar pues los aburridos medios de comunicación no hacen más que repetir los cuatros trazos biográficos con que encerrar en un tópico desde hoy mismo a tan grande hombre y pensador cuya rebeldía frente al Estado lo pone en el candelero de la actualidad española. Quiere la casualidad que otro gran hombre de las letras, este de aquende el mar e hincado en el corazón de Iberia, muriera hace ciento ochenta años por su propia mano, en lo que bien puede juzgarse como un último acto de desafuero contra sí mismo, pero también contra el mismo Estado, o más aún, la sociedad servil e insidiosa que lo conformaba. Para dejar muestra de su pensamiento basten unas líneas:
-"La ley nunca hará libres a los hombres, son los hombres los que deben hacer libre a la ley. Los amantes de la ley y el orden cumplen la ley cuando el gobierno la infringe.// Entre los seres humanos, el juez cuyas palabras determinan el destino de un hombre en la lejana eternidad, no es el que simplemente pronuncia el veredicto de la ley, sino ese, quienquiera que sea, que por amor a la verdad y sin prejuicios basados en costumbres o leyes humanas, pronuncia un juicio justo o una 'sentencia'. El que sea capaz de discernir la verdad, ha recibido sus poderes de manos de una fuente más alta que la del más alto juez del mundo al que sólo le preocupa la ley. Se constituye así en juez del juez. ¡Resulta extraño que tengamos necesidad de establecer verdades tan elementales!"
(Fragmento de "Desobediencia civil y otros escritos", de Henry David Thoreau, según traducción de Mª Eugenia Díaz para Alianza Editorial.)
-"Se ha establecido en Madrid un sistema de libertad que se extiende hasta a la imprenta; y con tal que no hable en mis escritos ni de la autoridad, ni del culto, ni de la política, ni de la moral, ni de los empleados, ni de las corporaciones, ni de los cómicos, ni de nadie que pertenezca a algo, puedo imprimirlo todo libremente, previa la inspección y revisión de dos o tres censores. Para aprovecharme de esta hermosa libertad anuncio un periódico..."
(Cita de Pierre-Augustin de Beaumarchais con que Mariano José de Larra encabezó, en francés, los cinco volúmenes de la 'Colección de artículos' que publicó precedidos por el epígrafe 'Le mariage de Figaro'; en el quinto, el titulado 'Un periódico nuevo', el propio Larra ofreció la versión en castellano que acabamos de leer.)
Nadie diría que "sólo" hace dos siglos de esto.

LARRA Y LOS POBRECITOS CRITICADORES

Más de cuatro zurcidores de palabras niegan hoy a Larra el derecho a quejarse por las condiciones en que se escribía en Madrid, y por ende en España, hace dos centurias. Argumentan los perspicaces, en libelos y expansiones tertulianas, que el hombre en que se embutía "Fígaro" había conseguido riquezas con la pluma y hasta quizá algún que otro arte diferente, como el de la seducción y el matrimonio de interés. Niegan en la actualidad, quienes nunca han sido distinguidos por el talento periodístico y menos el literario, que don Mariano José se refiriese a otra cosa que el dinero cuando afirmaba que "escribir en Madrid es llorar". Tal vez no les convenga a los mediocres de nuestro tiempo entender que la pobreza tiene que ver con el bolsillo y la miseria con la falta de competencia y autoridad en aquello que se aborde. Vayamos a la fuente. Escribía Larra que "escribir como Chateaubriand y Lamartine en la capital del mundo moderno es escribir para la humanidad; digno y noble fin de la palabra del hombre, que es dicha para ser oída. Escribir como escribimos en Madrid es tomar una apuntación, es escribir en un libro de memorias, es realizar un monólogo desesperante y triste para uno solo. Escribir en Madrid es llorar, es buscar voz sin encontrarla como en una pesadilla abrumadora y violenta. Porque no escribe uno siquiera para los suyos. ¡Quiénes son los suyos! ¿Quién oye aquí? ¿Son las academias, son los círculos literarios, son los corrillos noticieros de la Puerta del Sol, son las mesas de los cafés, son las divisiones expedicionarias, son las pandillas de Gómez, son los que despojan o son los despojados?" Bien puede inferirse que nuestros plumillas coetáneos yerran el tiro con su mayor objeción. ¿No será que se sienten reflejados en la miseria a que se refería el criticado maestro de las letras? Pudo ser uno grande siendo un "pobrecito hablador", tanto como pequeños estos pobrecitos criticadores que dan palos de ciego y encima hablan por boca de ganso, el ganso del otro dinero, el que no puede pagar la falta de vuelo en el aire de la escritura.

LA REALITAT, EL DESIG I EL DESENCÍS

A Sant Pere de Ribes, la llei, les ordenances i la realitat també segueixen camins paral·lels. Al mig, la hipocresia: carrers que gairebé ningú no neteja, però tothom n'embrutem, inclosos els gossos, que mercès a la incivilitat de molts dels seus propietaris n'hi fan un "pipican" gegantí; xarxa insuficient i precària de clavegueram; manca de sortides del poble en direcció Sitges per a vianants, carretera sinuosa que a més constitueix un perill extrem fins i tot per a la circulació rodada, especialment dels autobusos; concentració intolerable (legal?, legítima?) de grans superfícies comercials en un carrer (el de la Torreta, el meu) que ha se suportar el trànsit constant dels seus clients i la càrrega i descàrrega dels camions de gran tonatge (per a què i per a qui són els polígons industrials?); parcs, com ara l'anomenat de Salvador Espriu (conegut popularment com a "dels ànecs"), que l'alcaldessa, prèvia adequació per la via de les urgències, n'aprofita per a rebre les peticions ciutadanes de primera mà; empreses de rehabilitació de façanes que posen en perill la integritat dels vilatans sense que ningú del consistori (polítics que passegen, policies locals també passejadors...) actuï de part; biblioteques que redueixen a l'estiu el seu ja migrat horari; aïllament històric (per pobre, escàs, deficient) dels dos nuclis urbans entre ells (Ribes, Roquetes, català, castellà, Llach, Serrat, els uns i els altres...) i amb les poblacions limítrofes... Bé, n'hi ha prou de moment. Ara, una mica de desencís amb glaçons. Això sí, sense falsos punys enlaire.

EL CAPITALISME D'ALGUNS ANTICAPITALISTES

El proppassat divendres vaig assistir a Sant Pere de Ribes a un acte de suport al referèndum del proper u d'octubre organitzat, entre d'altres, per la Candidatura d'Unitat Popular (CUP) del poble, el cap visible de la qual és en Joan Garriga, diputat del Parlament de Catalunya. Entre els oradors, n'hi havia la representant del grup "Anem a mil", integrat per ciutadans que lluiten perquè els sous dels treballadors no baixin dels mil euros. Hom podria dir que tots els presents combregàvem de grat amb aquesta iniciativa. Tanmateix, l'endemà m'assabento que a l'entitat cultural i esportiva de més anomenada del poble, i que n'administra gent propera a la formació anticapitalista CUP, n'hi ha un treballador (qui sap si en són més?) sense contracte. Ganyotes, exabruptes. Anticapitalisme? Lenin, digue'ns, què hi hem de fer?

dimarts, 11 de juliol del 2017

FIDELIDAD CONSTITUCIONAL DEL FUNCIONARIADO

El africanista sublevado en Canarias, títere asesino a sueldo de la burguesía española que apenas se comió las migajas del desastre colonial, nunca sintió la erótica de tal lealtad ni pensó en pensar, aunque mal y trepanación mediante fuera.

EL DUDADOR CORNELLANENSE Y OTROS QUE AÚN NO HAN RECIBIDO LA ENCOMIENDA

Dudar entre lo (malo, con seguridad) conocido y lo (¿bueno, quizá?) por conocer es propio de indecisos por desconocimiento y contumaces con mucho que perder.

CARLOS (-ESTEBAN) DESENCADENADO

Sólo los genios que salen de las lámparas me parecen humanos.

dissabte, 8 de juliol del 2017

VER

No pondré imágenes en tus ojos, pues carezco de visiones al uso. Ya tú ves por los dos, aunque hurgando en el saco de los ciegos avisados no saques más que bultos desprendidos de la común sombra que ampara a los derrotados por el Sol.

LAS HABITACIONES Y LOS HUÉSPEDES

Pocas veces me reconozco en grandes palabras como biblioteca, escritor, poeta. En la casa familiar (no la considero mía, sino nuestra, de los tres que la levantamos diariamente con nuestro vivir y convivir), cada cual tiene su habitación. También los libros, que no son huéspedes, pero tampoco son míos, sino de quienes los lean, los miren dormitar o los adoren o detesten sin saber de ellos más que, por fuera, libros parecen. Nada acoge a nadie ni nadie se refugia en nada. De los libros, la habitación, como del primogénito, del segundogénito y del matrimonio (bien avenido, por cierto, en este caso) las suyas respectivas. ¿Biblioteca, escritor, poeta? Según se dé la relación, pero sin mayor tiempo que el que sucede mientras en los nombres no se piensa. Como los huéspedes en ejercicio.

divendres, 7 de juliol del 2017