dimecres, 26 de juliol del 2017
TRAMPANTOJO JUDICIAL (IV: NO LA CANCIÓN DEL PIRATA, NO)
"Caliente, caliente, eh, oh,/ caliente, caliente, oh, ah" No, no, con esta no se hace el amor en el sur, que esa es otra canción. Con la justicia y sus amigas -la democracia, la libertad, la igualdad y demás hetairas-, circunspección, corbateo y amenazas de solución final a la española. "Caliente, caliente, eh, oh,/ caliente, caliente, oh, ah". Presida, presidente, "caliente, caliente", presida y no emascule al ausente y soberano pueblo que en la calle ni grita ni silente espera la ocasión de bailar con otra que con la más fea, la vergüenza de su venalidad miserable, la miseria de su impudicia. Canta, Raffaella, "caliente, caliente, eh, oh,/ caliente, caliente, oh, ah". Mariano está en la sala, "caliente, caliente", le han concedido entrar sin medida, "oh, ah". Sí, sí, "caliente, caliente, eh, oh,/ caliente, caliente", y más y más y más.
Subscriure's a:
Comentaris del missatge (Atom)
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada