dimarts, 25 d’octubre del 2016
FILIBUSTERISMO EN MARCHA
Si el sentido común del que carecemos mayoritariamente no se impone, dentro de escasas fechas dará comienzo la legislatura de lo que he de bautizar como la rancia hispanidad, de cuya representación parlamentaria es responsable no una barbarie ajena que nos aturdiese, sino las cortas miras de la sociedad española en su conjunto. Pero no se crea que con el "sí quiero" (u otorgamiento del tenor "haz conmigo lo que quieras, nena") del PSOE al PP, la paz de los... ejem..., del Parlamento está garantizada, no. El filibusterismo, sancionado con la decisión traidora del partido socialista sin socialismo, será la práctica habitual a partir de la formación del nuevo gobierno de Rajoy. El todos contra todos, sin embargo, quedará matizado por la caída definitiva de la máscara del partido partido que fundara Pablo Iglesias Posse. Alineado aquél con la derecha ("derechona", "ezoh shorissoh", al decir del mahleriano Alfonso Guerra, el falso descamisado Alfonso), las únicas opiniones discrepantes al discurso de la España oficial serán las de algunos políticos de izquierdas atrevidos, que no teman ser expulsados de la formación política que los quiere atenazados y tiranizados mediante la disciplina de voto, y los de los partidos nacionalistas, a los que habrá que llamar "periféricos", puesto que el PP y el PSOE son, en verdad, más nacionalistas que el Caudillo. Esto ya huele a España-verdad. Tras la investidura del "mire-usted", las barras de bar españolas comenzarán la legislatura del hispano filibusterismo y nutrirán de ideas a los famélicos diputados y senadores. España no se romperá, ni falta que le hace, ni por mucho que se empeñen esos catalanes. Harapos y modistos harán que suene lo que no suena ni con patrón ni estigmas de santa Gema.
Subscriure's a:
Comentaris del missatge (Atom)
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada